Metrópoli de Grenoble – Ataques coordinados contra antenas-retransmisoras

Ataques incendiarios alrededor de Grenoble

¿Infraestructura o insubordinación?
Cada día de tu vida, tu cuerpo dice cosas. Y tu cuerpo no puede mentir.
¿Oyes el sonido de los motores, el zumbido de los drones, los helicópteros… el destello de las luces de neón, las farolas?
¿Cuántas horas al día pasas frente a una pantalla de TV? ¿Pantalla de computadora? ¿Tablet? ¿Smartphone? ¿Detrás de una ventana? ¿Parabrisas?
¿Te molesta cuando las ventanas no se abren? ¿El aire acondicionado resuelve el problema?
¿Los programas, aplicaciones y algoritmos guían tu vida?
¿Cuántas horas al día duermes? Y lo más importante, ¿cuál es la calidad de tu sueño?
¿Sigues siendo consciente de los estímulos que te rodean?
¿Cómo reaccionas al sonido, la luz, el calor, el tacto?
¿Es la música una forma de llenar el silencio o de provocar emociones?
¿Cuántas de tus emociones necesitan el alcohol u otras drogas para expresarse?
¿Haces muchos movimientos diferentes con tu cuerpo? ¿Está descubriendo cosas, nuevas amplitudes?
¿Cómo te afectan las situaciones de pasividad forzada?
¿Cómo te sientes afectado por el constante ataque de sonidos? ¿Voces artificiales? ¿Vídeos? ¿Publicidad? ¿Eslógans publicitarios?
¿Qué sentimientos perpetuos de urgencia crean?
¿Necesitas momentos de contemplación? ¿Recuerdas cómo se siente?
¿Hasta dónde puedes «estirar la vista»? Si sólo son unas pocas docenas de metros, ¿qué estado mental crees que crea?
¿Cómo te afecta la multitud? ¿Cuánto espacio necesita tu cuerpo? ¿Cómo te afecta el tamaño de la habitación en la que vives, el número de ángulos rectos, el número de líneas paralelas, cuadrados, formas geométricas?
¿Necesitas ver el cielo? ¿Ver el agua? ¿Ver los árboles? ¿Animales?
¿Por eso tienes un perro? ¿Un gato? ¿Plantas en maceta? ¿Un balcón? ¿Por eso vas al parque?
¿De dónde viene tu comida? ¿Qué relación tienes con ella? ¿Crees que lo que ingieres es bueno para ti?
¿Recuerdas la última vez que comiste algo que no venía del supermercado?
¿Cuánto tiempo puedes pasar sin saber qué hora es?
¿Cómo sientes que te afecta la espera? ¿Esperar en la fila, esperar en el tráfico, esperar para orinar, esperar para aprender a disciplinar sus necesidades?
¿Cómo te ves afectado por la represión de tus deseos? ¿El formateo, la negación o la frustración sexual de la infancia? ¿El miedo o la competencia con personas del mismo sexo que tú? ¿La sexualidad como medio de reproducción/ de control?
¿El placer es peligroso? ¿Puede el peligro ser alegre?
¿A veces todavía sientes un desierto dentro de ti? ¿Vida animal?
¿Sientes un vacío, una falta de significado tan fuerte que las palabras apenas pueden expresarlo?
¿A veces te sientes al borde de perder el control?
¿No crees que esa debería haber sido la señal?

La noche del 17 al 18 de mayo de 2020, dimos fuego a la antena repetidora de Haute-Jarrie.
Al menos otras dos antenas fueron atacadas simultáneamente en las cercanías de Grenoble.

Las antenas-relevo son uno más de todos los intrusos que desfiguran el paisaje. Se utilizan para la comunicación de masas, pronto incluso en los lugares más remotos. En la actualidad, las instalaciones de 5G se están desplegando para este propósito.
El parloteo y el murmullo de las masas y el bombardeo publicitario revelan el verdadero vacío de comunicación tanto como la ausencia de comunicación real. Pero no puede haber verdadera comunicación sin verdaderas “relaciones sociales”. Las falsas relaciones sociales de las redes sociales son un claro indicio de ello.
El vacío existencial de una época puede medirse, en particular, por el incesante vacío comunicacional que lo llena.
Pero no queremos un mundo en el que la garantía de poder comunicarnos a distancia, constantemente y en todas partes, sea intercambiada por el hecho de que podamos estar constantemente vigilados y controlados.
Aparte de los tontos que se regocijan en una vida y un mundo “aumentados” no se dan cuenta – o aceptan – que están intercambiando una cantidad cada vez mayor de restricciones por una calidad de vida cada vez más espantosa. No es más que la existencia vestida con los odiosos harapos de la sub-vida.
En el mundo del inframundo, además de ser colonizado por los seres humanos, de estar cubierto de cicatrices de asfalto, además de la destrucción de tantas otras formas de vida que alberga, etc., la tierra, en toda su extensión, está equipada y cuadriculada (entre muchas otras) por instalaciones de telecomunicaciones. Incluso a través del cielo, que está atravesado por tantos viajes de transporte aéreo, ya no son sólo constelaciones de estrellas sino constelaciones de satélites las que surcan el espacio.
La radiactividad, las ondas electromagnéticas, la contaminación y los virus de todo tipo son el oxígeno cada vez más viciado del siglo XXI.
No es sorprendente que, con la conciencia de todo esto, este mundo haga pensar en una “prisión al aire libre”. Más aún cuando la actual pandemia ha permitido y seguirá permitiendo que el Estado nos ponga, a través del confinamiento, en régimen de aislamiento, aunque en su mayor parte personalizado.
Para aquellos que aún lo dudaban, el sistema carcelario es, por lo tanto, el aspecto punitivo de esta organización gubernamental de la vida. Una organización que pronto conducirá a una vigilancia y control generalizado de las masas gracias a la inteligencia artificial, cámaras y teléfonos inteligentes con reconocimiento facial, todo ello a través de Internet.
El confinamiento ha demostrado ampliamente que las telecomunicaciones son fundamentales para la vida de las “personas” hasta el punto de aceptar el auto encierro.
Mientras que algunos, con sus escaparates (“procesión”, ” manifestación”…), han elegido su simulacro, otros han (seguido) propagando la revuelta haciendo pintadas, rompiendo, golpeando, saboteando, incendiando…
¿Qué opciones quedan en este mundo?
¿El de la sub-vida donde las preocupaciones son el nuevo gadget a comprar, la nueva aplicación a descargar?
¿O el de la insubordinación y la revuelta, cuyas preocupaciones son las experiencias sensibles vividas según sus ideas, la realización individual despojada de tantas limitaciones sociales como sea posible…?
La insubordinación es apartarse de ésta sub-vida.

Unos murciélagos que transmiten el fuego

[de attaque.noblogs.org, publicado 19 mayo 2020]

Bienvenidos al futuro – En transición al neo-feudalismo. Por Nihil

“Solamente puedo reproducir lo que veo, lo que pienso y,
decirlo más exactamente, lo que pensamos NOSOTROS

“Me acordé de determinado cuadro en el museo (se trataba de una asociación de contrastes):
una calle del siglo XX, una policroma confusión de
hombres, engranajes, animales, pasquines, árboles, colores y pájaros…
¡Y aquello había existido realmente!
Me pareció tan inverosímil y absurdo, que no pude dominarme,
y prorrumpí en una sonora carcajada”.
D-5031

Desde hace algunos años, la máxima prioridad de los gobiernos y las empresas ha sido acelerar la transformación digital para, acelerar (valga la rebusnancia) el desarrollo global. Además de la industria farmacéutica, la otra gran ganadora debido a la pandemia es la tecno-industria. Ya se comienzan a hinchar sus carteras gracias al “apoyo” de los servicios de la digitalización global.

Poco antes de la llegada del año 2000, cuando un supuesto colapso en los computadores de entonces –por no programar dicho año– ocasionaría fallos catastróficos si no se corregía a tiempo; platicaba hasta la divagación con un compañero sobre dicha situación, y terminé concluyendo que “el día en que el sistema acabe con la convivencia física entre humanxs, sería el comienzo de una nueva era”, en ese momento aún no me percataba que estábamos en la antesala de la era digital: en los albores de la Cuarta Revolución Industrial.

Una suerte de revival de la distopía iniciada a finales del s. XIX –con el inicio de la Segunda Revolución Industrial (1870-1914)–, ha tomado vida hoy. El arribo de esta nueva distopía pareciera que nos conduce a reflexiones catastróficas, apocalípticas, fatalistas, pesimistas, etc. A lo largo del tiempo la hemos percibido como una ilusión, similar a la supuesta caída del capitalismo “predicha” desde los tiempos de Marx. Sin embargo, lo que vemos es que el mercantilismo actual va hacia la liberación económica tal como lo teorizara Hayek; es decir, parece que este tipo de capitalismo como lo hemos estudiado y conocido, ha sido una puesta a prueba a propósito y que, con la programación de la generación millenial y el avance tecnológico, ahora sí están listos para dar el siguiente paso, a menos que sectores de la alta burocracia se opongan reciamente y sigan con la idea de mantener a los Estados como unidad rectora y dominante; lo que podría reforzar la propuesta del nuevo populismo que va promoviendo Michael Onfray, mientras que los millenial –más en sintonía con los libertarianos– van empujando a lo primero; pero también hay un reacomodo en las elites y la imposición de nuevas teorías, pues no solo han surgido estos dos grupos antagónicos (que por cierto, afirman que el debate izquierda-derecha está agotado o desfasado en la era digital), sino que también salen a la luz los denominados NRX en el que aparentemente se conjugarían ambas ideas, es decir, hacer Estados-empresas, según la división geográfica-política actual y, cabe destacar, que es muy probable que los “movimientos ciudadanos” también se actualizarían como los llamados anti-extinción, que serían los que se acomodarían a cualquiera de estas tendencias, siempre que se asegurara la supuesta sostenibilidad y la perpetuación del ser humano sobre el planeta.

Por si fuera poco, habría que añadir la dosis permanente de series y programas distópicos que inundan las plataformas streaming que inyectan a la sociedad, como parte de un adoctrinamiento para mentalizar a la gente y acostumbrarlas a asumir cualquier hecho catastrófico ocasionado por el Sistema de dominación, donde este mismo termina siendo el héroe capaz de salvarlos, como el caso de la actual pandemia.

 

La Tormenta Perfecta

“el etnocidio puede tener un giro positivo, el etnodesarrollo”.
MIA-FONATUR2

El toque final que ha permitido consolidar el control y la vigilancia ha sido la pandemia. Sin duda, jugada maestra del sistema de dominación para forzarnos a la adaptación a esta nueva era.

Bajo la muletilla de mantenernos sanos y seguros, han creado una hipnótica obediencia que, ante la infinita repetición, normalizaremos poco a poco la ausencia de contacto afectivo: visual, interacción física o verbal; además de que todo lo que tocamos masivamente ahora será objeto de miedo; es decir: el fin de la convivencia social. De esta forma nos resetean el chip para la aceptación de la nueva normalidad de obediencia y confinamiento, con el Internet como aliciente contra la ansiedad y la depresión provocada por el incremento de soledad. Con el engaño de que la rápida migración a las nuevas tecnologías digitales originada por la pandemia será la clave para la recuperación.

El estudio sobre conectividad Mobility Report 2020 de Ericcson, menciona que México será de los primeros países de LaTam en conectarse al 5G y el Estudio de Hábitos de Usuarios de Internet en el país, indica que actualmente hay más de 80 millones de usuarios que se conectan vía smartphone (92%), teniendo como actividades el acceso a redes sociales (82%), mensajes (78%) y streaming de películas y videos con 65%.

Esta sociedad online, junto a la nueva clase productiva3 , es la que nutrirá y mantendrá en funcionamiento los neo-feudos y la sociedad terrenal -offline, los que estaremos en el rezago digital o navegando dentro de los limites como excluidos digitales; los salvajes que aprovecharemos la oportunidad no solo para sobrevivir fuera del radar del control digital sino para mantener la insurrección permanente sin tregua. Evidentemente, en este momento resulta imposible el sueño de la autogestión hasta no concretar la destrucción total del Sistema de dominación.

 

El sentido común como primera línea de defensa (y ataque)

“En estos días de pandemia, nos ha tocado ver al anarquismo en la vidriera de la tienda de regalos. Se ha estado vendiendo con la etiqueta roja de liquidación junto a otras mercancías ideológicas como «alternativa» políticamente correcta; orientado a la positividad, la construcción, la cooperación, los cuidados, la integración y, la reforma, en busca de aceptación social y «alianzas estratégicas»”.
Gustavo Rodríguez

Pena ajena nos provoca ver como los changarros alternativos de los entrepreneur´s de la fauna “anárquica” se acomodan a vender sus mercancías en la era digital; es decir, como presentan sus proyectos pretendidamente anarquistas a través de los mismos medios que los espían y les hace su “perfil” para mantenerlos en una burbuja, aislados de otros segmentos. En este sentido, el movimiento local es más un cuerpo avejentado con una supuesta vitalidad activista que se va moviendo según la marea, tomando la senda que les impone el Sistema. Para decirlo, en palabras del compañero Gustavo Rodríguez: “…una extensión «mejorada» de la misma que emplea tácticas idénticas (al Sistema) en busca de aprobación y legitimación, develándose como un pulcro y eficiente vendedor de la tienda de regalos.”4

Quien más que el Sistema, desea curar al movimiento de la enfermedad de la insurrección anárquica; depurarlo de esta infección maligna para absorberlo y diluirlo en el más sumiso ciudadanismo, transformándolos en inofensivas criaturas estereotipadas e imitadoras; vieja costumbre adquirida que ha venido destruyendo de forma reiterada nuestras tendencias impulsivas, salvajes, y naturales cargadas de sentido común. Una buena parte de este cuerpo envejecido se ha perdido en indecisiones y perplejidades en torno a la practica anárquica que ya debieran estar engranadas en su propia naturaleza.

Reitero lo dicho por el compañero, con el ánimo de originar una propuesta al anarquismo ucrónico (los que puedan recordar, valorar y establecer una acción), capaz de abandonar esta mala costumbre, de olvidar los discursos abstractos y aprovechar las oportunidades prácticas; es decir, concretar nuestro campo de acción, de acuerdo al contexto individual y la propia creatividad (que tanta falta hace) abocados a los actos de insurrección no solamente cuando los mítines y manifestaciones lo propicien, sino de manera permanente. Nuestro sentido común debería operar bajo la pauta de reconocernos en esta situación e impulsarnos a relegar esa emulación en pequeña escala con la sociedad capitalista, claro está, esto solo es posible si en realidad desean no preservar y revitalizar ese cuerpo avejentado en que reposan y les convida a dar bandazos cada vez que una simple palabra proveniente de trincheras ajenas les excita, desviándose del camino negro y la praxis anárquica insurreccional, sino renacer de las cenizas como siempre hemos hecho en nuestra historia.

Quizá todo lo anterior a muchos les parezca una fantasía, pero considero que lamentablemente siempre hemos tenido mayor habilidad para desarrollar nuestros antagonismos que nuestros afectos; sin embargo, entiendo que si verdaderamente buscamos la liberación total debemos encaminar todos nuestros esfuerzos hacia una ruta compartida. El compañero Kosta Cavalleri, junto a Bonanno y otrxs compañerxs, ya habían hecho una propuesta a fines de los 90`s; pero lo mío es solo una invitación a todxs lxs que navegamos en la Tendencia Informal, y seguiremos dicho camino (con particular coincidencia con las propuestas del compañero Gustavo) conservando intacto el mal sabor de la derrota de aquellxs afines vencidxs a través del tiempo; las llamas de la insurrección han inflamado mi pecho y me incitan a cultivar el fuego hasta descabezar a la Dominación y arrojarle su cabeza a lxs ciudadanxs que lo adoraron de rodillas.

Desde algún lugar, infectado por la pandemia
Nihil
Julio de 2020


1.  Nosotros, Yevgueni Zamiatin, Akal 2008.

2. Aunque quisieron componer la frase emitida tras la lluvia de críticas, ya está dicho y es la idea general del gobierno PEJISTA o de cualquier otro.

3. El filósofo francés Paul Virilio, hacía una comparación de los empleos laborales del s. XX e inicios del s. XXI, con los campos de concentración de la 1ª. y 2ª. Guerra Mundial, en el que este formato laboral era una especie de evolución de dichos campos. Ver, El Arte del Motor, Aceleración y realidad virtual. Ediciones Manantial, 1996, Buenos Aires, Argentina.

4. La capacidad heurística de la anarquía, disponible en: https://anarquia.info/la-capacidad-heuristica-de-la-anarquia/

[de anarquia.info]

Francia – Carrera por el 5g, otras formas de lucha toman el relevo

El jueves 9 de julio, dos hombres serán juzgados por el tribunal correctionel de Lons-le-Saunier, acusados de haber incendiado el pasado 15 de abril un repetidor telefónico en Foncine-le-Haut, Jura (Francia).

En los últimos meses, más que de costumbre, las antenas de relevo han estado ardiendo en todo el mundo. Mientras los medios de comunicación se apresuran en el complot para despolitizar las razones del ataque a las torres celulares y al 5G, la policía hace su trabajo sucio, y ya ha arrestado a algunas personas. El juicio de los dos jurasianos es uno de los primeros en ser cubierto por los medios de comunicación en Francia. El acusado tendrá que someterse a un examen psiquiátrico antes de la audiencia. [1] Sin embargo, parece que esta locura es ampliamente compartida.

El 16 de junio, otras dos personas fueron arrestadas por gendarmes en una vigilancia cuando entraron al sitio de la antena de relevo 5G de Contes, que está en construcción. El dispositivo de 21 metros ya había sido objeto de varios ataques (ventiladores dañados, cables cortados), lo que daba sustancia a la protesta que los habitantes de la comuna, el alcalde y el colectivo NARF (No a la Antenne-Relais Free) han estado llevando a cabo durante casi un año contra su instalación, a través de debates públicos y acciones legales. [2]

Durante años, y probablemente desde su aparición, se han lanzado protestas contra las infraestructuras de flujos de comunicación: líneas de alta tensión [3], redes de fibra óptica, operadores de telecomunicaciones, antenas de telefonía móvil, etc. Se han desplegado por todo el país “redes” anti-linky y anti contadores de gas inteligentes. Se han organizado campamentos. Se llevaron a cabo sabotajes o acciones simbólicas. Se han realizado estudios independientes y se han publicado artículos de contrainformación. Se han enviado apelaciones y peticiones legales.

Rechazo a vivir en un mundo hiperconectado. Hay muchas razones para ello, y no siempre están libres de contradicciones. Si bien no todos los actores de la protesta comparten, por ejemplo, el mismo ideal revolucionario, ni un consenso sobre los modos de acción, seguimos encontrando regularmente observaciones similares sobre la explotación de los trabajadores y el medio ambiente, los riesgos para la salud, la centralización, la mercantilización de los datos y el control que permiten estas tecnologías, los beneficios que aportan a las multinacionales que ya se ahogan bajo la indecencia de sus riquezas, la alienación de los individuos (empezando por la atomización de los seres frente a sus pantallas, la destrucción de los lazos sociales, la saturación de información sesgada, la pérdida de concentración y de facultades mentales y físicas, el despojo tanto de los conocimientos técnicos como de las posibilidades de dominar las herramientas que se utilizan). Y la lista está lejos de ser exhaustiva. Mientras que algunos tratan de promover tecnologías más democráticas y “más verdes”, otros señalan las infinitas contradicciones del sistema y ven en la crítica o la destrucción de estas infraestructuras un medio para atacar al corazón del orden capitalista.

« Fuck 5G », las ondas de más

Los últimos meses (abril, mayo, junio 2020) se multiplicaron los sabotajes en numerosos países contra antenas de telefonía en el contexto anti-5G [4]. Olvidando toda la oposición política que se ha ido gestando a una escala relativamente grande desde que se trata de someter a la población a esta nueva tecnología, la prensa dominante se apresuró a ver la enésima teoría conspirativa. La prueba de ello serían las publicaciones de grupos en las redes sociales – particularmente en inglés – defendiendo una hipotética transmisión del coronavirus a través de las ondas. Lo único que se oye en un vídeo en inglés es « Fuck 5G » et « Viva la Revolución », mientras arde una antena telefónica el 2 de abril en Belfast.

Otro tipo de llamada circulaba desde el 2 de abril, traducida en varios idiomas, que poco tenía que ver con la transmisión del virus a través de las ondas: « Ahora que casi todo el mundo trabaja/estudia/comparte/se relaja/se instruye/se subleva/tiene sexo… detrás de una pantalla, ¿ que ocurriría si algunos cables de fibra óptica bajo una trampilla fácilmente accesible fueran saboteados ? Ahora que quasí todo el mundo ”comunica” con teléfonos. Ordena/dispone/planifica/se organiza para producir (y a veces para militar), o “cuida” con aplicaciones o llamadas constantes, ¿que ocurriría si antenas de telefonía móvil (que, a veces, se encuentran en sitios poco frecuentados) llegaran a estar fuera de servicio ? » [5]

Si la ola de fuego que ha barrido un gran número de torres de telefonía en los últimos meses tiene algo que ver con la crisis sanitaria, tiene menos relación con el virus que con las políticas de gestión gubernamentales que han respondido a él. En nombre de la emergencia sanitaria, se ha aplicado un control sin precedentes a casi la mitad de la población mundial, con un ataque histórico a las libertades individuales llevado a cabo con una falta de respuesta casi atroz.

Quienes se han beneficiado de las políticas de confinamiento son, como es lógico, los actores y promotores de lo digital. Hace más de medio siglo que se informatiza la sociedad y se automatiza el trabajo, lo que ha permitido reducir los costes de producción, despedir trabajadores cuyas importantes luchas obreras en los años setenta amenazaban gravemente a las empresas, reestructurar el capitalismo abriendo nuevos campos de valor en el servicio y el tratamiento de los datos, hacer más fluidas las bolsas de valores y adquirir un control cada vez mayor de las poblaciones con la videovigilancia, el seguimiento informático y bancario y la geolocalización. El confinamiento ha permitido dar un tremendo salto adelante a los defensores de la digitalización y el rastreo, que se enfrentan regularmente a la resistencia de una sociedad que se muestra reacia a permitir una reestructuración según los planes del mercado. « A la televigilancia, la teleconferencia, la tele-visión, la teletienda, el teletrabajo, etc., se añaden ahora los juicios a distancia, la teleconsulta y la teleescuela. El ineludible auge de la domesticación digital. » [6]

Mientras que el régimen de vigilancia está despegando, basado en la recopilación de datos que ha proliferado gracias a la telecompra y al aumento del tiempo de conexión, el despliegue de drones o dispositivos de control como el reconocimiento facial, cuya crisis sanitaria ha permitido a los Estados Unidos generalizar su uso en los aeropuertos (el método de identificación sin contacto sería menos contagioso que el control de pasaportes..), que el estrangulamiento totalmente digital se está estrechando y que millones de trabajadores se encuentran desempleados, las cotizaciones bursátiles de las empresas de alta tecnología se han disparado. La fortuna de Jeff Bezos, el CEO de Amazon, ha aumentado más de un 30% entre marzo y mayo, y la de Mark Zuckerberg más de un 46% (treinta mil millones de dólares adicionales para el jefe de Facebook) [7]. Y mientras tanto, la extracción de metales y tierras raras necesarias para la industria digital sigue devastando territorios chinos, africanos y americanos, aplanando montañas, destripando llanuras, envenenando ríos, a través de trabajos mal pagados, guerras civiles por los recursos y cánceres para las poblaciones circundantes.

Las generaciones con obsolescencia programada

Como el 3G y el 4G, el 5G es una respuesta a la amenaza de saturación de la red, y apunta a un aumento del rendimiento y reducción de latencia. Sin embargo, su particularidad radica en un funcionamiento multicapa, capaz de recibir múltiples tipos de señales en diferentes frecuencias. De esta manera permitirá el desarrollo masivo de la medicina a distancia, las fábricas del futuro y el Internet de las cosas [8]. Para el 2025 se espera que estén conectados más de 50 mil millones de objetos: coches autónomos por supuesto, relojes, refrigeradores, aspiradoras, sistemas de control remoto para casas (¡todo llegará!), pero también paquetes, contenedores, equipos industriales, tecnologías de la salud…

Mientras que Internet se alimenta del 15% de la electricidad mundial (el equivalente a 100 reactores nucleares) [9], la infraestructura de la red debe ser desarrollada aún más. En primer lugar, eliminar las zonas blancas y cubrir todo el territorio con Très Haut Débit [10], porque sería insoportable que la parcela más recóndita del mundo pudiera escapar a la posibilidad de conexión. Aquí es donde las perspectivas públicas se unen al proyecto Starlink de Elon Musk, que ya ha empezado a cubrir el cielo con satélites [11] y planea enviar hasta 50.000 satélites en los próximos años, seguido de otros gigantes digitales (Amazon, One Web, Boeing, Samsung…) [12]. Estos satélites permitirán conectar lugares sin estaciones y proporcionar ancho de banda en caso de sobrecarga de la red local. En cuanto a Francia, será necesario entonces adaptar 20.000 antenas –ya existentes para las bandas de frecuencias de 3,4-3,8 GHz inicialmente atribuidas a los operadores para la primera etapa del desarrollo de 5G–, y construir 5.000 nuevas [13], a la espera de autorizaciones para instalar muchas otras separadas por distancias menores para poder transmitir ondas milimétricas. Pero Además de las antenas de retransmisión el despliegue del 5G requiere la instalación de pequeñas celdas: una multitud de miniestaciones de baja potencia que actualmente se están probando en entornos cerrados (aparcamientos, centros comerciales, estadios) y que pronto estarán en postes de alumbrado, en lo alto de edificios, en vallas publicitarias y paradas de autobús, con la amable participación de JC Decaux. [14]

Desde 2017, científicos de todos los países han estado advirtiendo de los peligros de la exposición a las ondas y pidiendo una moratoria sobre el 5G. [15] Las asociaciones para la protección del medio ambiente que también trabajan sobre los riesgos para la salud vinculados a las ondas han presentado recursos ante el Consejo de Estado[16]. El 25 de enero de 2020, tuvo lugar la primera manifestación internacional contra el 5G, seguida de otras el 28 de abril y el 4 de mayo en La Haya. Mientras que las generaciones anteriores de Internet no nos exponían a más de 6 GHz, la protesta pública en sus múltiples expresiones está retrasando la asignación de las bandas de 26 GHz a los operadores. Suiza y Bélgica, entre otros países, han tenido que establecer moratorias que frenan el avance de los trabajos.

Concertación sí, pero no con cualquiera

Es en parte gracias a las olas de sabotaje que han agitado a los medios de comunicación en los últimos meses que se ha ganado algo de tiempo. Esta respuesta generalmente tiene el mérito de no estancarse en la ilusión de una regulación democrática y basada en los ciudadanos. Como sabemos, la misión de los comités de ética y las consultas públicas es proponer concesiones falsas para desactivar la resistencia que se opone a ellos, reunir a los más progresistas, reeducar a los idealistas, aislar a los radicales y, finalmente, dividir el bloque que se enfrenta a ellos. [17] Los militantes antinucleares no se equivocaron al denunciar la determinación del gobierno de construir a toda costa centrales nucleares a finales de los años 70. En Chooz, Plogoff, Golfech, una de las fases de la lucha consistió en la destrucción, el robo o el “resquebrajamiento” de los registros de consulta pública, en particular por parte de muchos alcaldes o funcionarios electos, que se podría pensar que serían más propensos a ser engañados por las vejigas democráticas. Algunos propusieron muestras de papel tapiz al Consejo General, argumentando que seguramente sería lo único que se les permitiría elegir sobre las centrales nucleares que estaban a punto de ser instaladas en sus tierras.

Escuchemos lo que dice Sébastien Soriano, presidente de Arcep, en una reciente entrevista sobre la regulación del 5G. [18] Después de haber resumido las críticas (« sabemos que las redes pueden tener salidas perjudiciales: usos intensivos de energía, sociedad de vigilancia, mala gestión consumista, dominio de las grandes empresas, instrumentalización geopolítica ») y de haber dado la impresión de poder responder a ellas mediante la regulación o el control ciudadano, finalmente establece el marco: « Aún con el riesgo de disgustar, Francia abrirá las puertas al 5G. No sólo por un imperativo económico o europeo. Sino porque es nuestro deber desarrollar las posibilidades de intercambio y reparto del país a través de la constante evolución de sus infraestructuras de comunicación. » Todo está dicho y hecho. Control ciudadano, sí, pero en el color de los cables. El 5G se implantará, la necesidad económica es demasiado importante. De la misma manera que las autoridades no estaban dispuestas a renunciar a la energía nuclear, unos años después de la pérdida de tierras mineras en las colonias y de la crisis del petróleo de 1973, cuando la construcción de centrales eléctricas apareció para Francia como una cuestión clave de la autonomía energética y un nuevo mercado de exportación, los países occidentales no tienen hoy la intención de quedarse atrás ante el desarrollo chino del 5G, y están acelerando los trámites para poder competir con Huawei y mantenerse a la vanguardia del desarrollo digital, el sector más prometedor del capitalismo. Así que hay poco que esperar de cualquier regulación.

Nos queda entonces rechazar la “pedagogía” de los gobiernos. Hasta que no se demuestre lo contrario, no somos ni ignorantes ni niños para ser reeducados. No somos unos paletos que se oponen a que nuestros jefes de Estado nos ilustren[19], sino que encarnamos un pilar antagonista a los intereses comerciales, que el otro bando no dejará de querer recuperar para sí mismo, o desacreditar en caso de fracaso. No vamos a aceptar sus míseras concesiones para validar democráticamente proyectos nocivos. No sólo nos oponemos al 5G, sino a todo un proyecto social que causa la devastación de lo viviente. Nos corresponde defender nuestra concepción de un mundo deseable, y rechazar cada paso hacia el fortalecimiento de la tecnocracia capitalista.

Solidaridad con los inculpados por el 5G!
Collectif de défense des vieux objets non connectés  [Colectivo en defensa de los viejos objetos no conectados]

 

Notas

Se han respetado las notas y links originales (en francés).
En cursiva añadido por traductor.

[1] https://www.lefigaro.fr/flash-eco/jura-contre-la-5g-deux-hommes-suspectes-de-l-incendie-d-une-antenne-relais-incarceres-20200527

[2] https://www.leparisien.fr/faits-divers/degradation-d-une-antenne-relais-de-free-interpellations-dans-les-alpes-maritimes-18-06-2020-8337747.php

[3] Ver https://antitht.noblogs.org/

[4] Para hacerse una idea : https://sansattendre.noblogs.org/archives/category/contre-la-science-et-la-technologie (en Francés).
–En la sección en español de plagueandfire.noblogs.org pueden
encontrarse numerosas reivindicaciones de ataques, principalmente en territorio francés (incluso en ultramar, como Martinica), pero también en otros lugares como Belgica, Holanda, Reino Unido, Mexico, Canada, Italia… ¿en la península ibérica cuando!?–

[5] –ES https://contramadriz.espivblogs.net/2020/04/09/llamamiento-desde-algun-lugar-primer-dia-de-mayo-corre-con-el-lobo-y-el-verano-una-llamada-al-conflicto/ https://attaque.noblogs.org/post/2020/04/02/en-mai-fais-ce-qui-te-plait-un-appel-au-conflit/ (Francés)

[6] Del comunicado en relación con el incendio de la antena de Chantemerle-lès-Grignan (Drôme), a principios de mayo de 2020
ES https://plagueandfire.noblogs.org/chantemerle-francia-atacada-antena-en-vercors/
https://sansattendre.noblogs.org/archives/13368 Ver también : https://sansattendre.noblogs.org/archives/13338

[7] https://www.europe1.fr/economie/coronavirus-la-fortune-des-milliardaires-americains-a-augmente-de-15-en-deux-mois-3970099

[8] « 5G, la nueva generación de redes móviles, traerá : – una latencia (tiempo de respuesta) dividido por 10, para comunicaciones ultra fluidas; – una densidad de conexión (número de objetos que pueden comunicarse simultáneamente en la red) multiplicado por 10, para el desarrollo de los objetos conectados; – un aumento del número de objetos conectados a la red, que es hasta 10 veces mayor que en 4G. ». https://www.arcep.fr/fileadmin/cru-1538472894/reprise/dossiers/programme-5G/Feuille_de_route_5G-DEF.pdf

[9] https://www.fournisseur-energie.com/internet-plus-gros-pollueur-de-planete/

[10] Respectivement prévus pour 2020 et 2022 pour la France, soit à très courte échelle. https://www.arcep.fr/fileadmin/cru-1538472894/reprise/dossiers/programme-5G/Feuille_de_route_5G-DEF.pdf

[11] Ver https://collectif-accad.fr/site/5g-et-les-satellites/

[12] https://reporterre.net/La-voute-celeste-envahie-par-les-milliardaires-du-numerique

[13] https://www.senat.fr/presse/cp20180719.html

[14] https://www.jcdecaux.com/fr/communiques-de-presse/jcdecaux-accelere-le-deploiement-des-petites-antennes-small-cells-sur-ses

Artículo de 2017, donde se nombra a JCDcaux junto a Cellnex con un importante rol (fabricación antenas) en el desarrolo del 5G–

[15] https://www.jrseco.com/wp-content/uploads/2017-09-13-Scientist-Appeal-5G-Moratorium.pdf

[16] Agir pour l’environnement et Priartem, le 17 février dernier.

[17] Véase en La Société ingouvernable (La Fabrique, 2018) el análisis de Grégoire Chamayou sobre la estrategia de contrainsurgencia del consultor de relaciones públicas Pagan para el grupo Nestlé, cuando se enfrentó entre 1977 y 1984 a un boicot internacional por vender leche materna que mataba a los bebés. Un resumen en esta entrevista: http://business-et-finances.com/gregoire-chamayou-pour-se-defendre-le-neoliberalisme-a-fait-refluer-le-trop-plein-de-democratie/

[18] https://reporterre.net/Favorables-a-la-5G-nous-souhaitons-tout-de-meme-un-controle-citoyen

[19] Esto es lo que dió a entender Macron en su discurso sobre el desarrollo de la inteligencia artificial: « Tendremos que encontrar un equilibrio en esta tensión permanente que será nuestra en este tema donde, cada día, tendremos la sensación de ser Prometeo pero donde tendremos que ver, como dijo RIMBAUD, «la dura realidad a abrazar, campesino». Y Prometeo termina mal cuando olvida al campesino, especialmente en las democracias. También tendremos que vivir con esta tensión y no somos necesariamente los más modernos cuando nos olvidamos de nuestro vecino de al lado porque vivimos al final con nuestro vecino de al lado. Y eso es algo en lo que también debemos pensar en nuestras propias innovaciones. https://www.elysee.fr/emmanuel-macron/2018/03/29/discours-du-president-de-la-republique-sur-lintelligence-artificielle

[Fuente: dijoncter.info / dijoncter.info (Tor)]

O mundo em Chamas! Atividade na Biblioteca Mumia Abu Jamal. Okupa Viuva Negra. Novo Hamburgo.

A nova realidade, imposta a força pela mídia e autoridades estatais.
Instalando um policial na mente de seus cidadãos, um policial que
observa, julga, pune e reprova encontros e afetos, pronto para denunciar
e excluir, aumentando a desconfiança e isolamento já há muito
estabelecidos na sociedade. A nova realidade de controle, de organização
do capitalismo onde entre o vácuo do isolamento as tecnologias prometem
ser a salvação e a felicidade confiando em seu mais íntimo amigo, o
smartphone, entregam seus costumes e hábitos, preferências e desejos
para bancos de dados que o conhecem melhor que qualquer amigx real. Em
nome da segurança, do bem social e do progresso.

 A crise atual era prevista, alguns estudos de diferentes universidades
alertavam sobre está possibilidade que vem sendo cada vez mais cíclica.

 O isolamento social vêm sendo usado para o controle das camadas sociais
que vêm a sofrer uma intensificação da violência institucional e não
pela saúde de seus súditos.

Acreditamos na necessidade de expressar o desacordo a narrativa
dominante que se aproveita para intensificar o controle sobre as vidas.

Não queremos sair para trabalhar e sim para retomar nossas vidas e tomar
de assalto este mundo de misérias.

Que estas palavras junto com ação sejam um sopro de energia a todxs
rebeldes em luta.

A todxs que sentem a liberdade gritar através de seus instintos.
Estamos em guerra!

Contra o estado, o capital e toda autoridade!

Biblioteca Múmia Abu-Jamal

Okupa Viúva Negra

Sale Rebrote nº 5 (mayo-junio 2020), boletín anticarcelario para presxs

Palabras previas

Compañerxs, tenemos el gusto de compartir con ustedes la publicación de
un nuevo número del boletín anticarcelario Rebrote.

Anhelamos profundamente que los gestos de solidaridad hacia lxs presxs
se sigan proliferando a pesar de este complicado contexto de crisis y
control social, en donde las expresiones del apoyo mutuo entre
marginadxs se diversifican con la finalidad de sobrevivir mientras el
aumento de la militarización de las calles pareciera volverse algo ya
cotidiano.

Las medidas restrictivas en las cárceles con la suspensión de las
visitas pareciera no cambiar por lo pronto, al menos mientras siga
siendo justificado por la pandemia mundial. Sabemos claramente que el
aislamiento ha sido un arma que el poder siempre ha utilizado para
reprimir hacia quienes se rebelan y no precisamente para protegerles.

Resulta más necesario entonces que nuestras palabras e ideas por la
destrucción total de los centros de exterminio sean consecuentes con
nuestro actuar y se materialicen en acciones de solidaridad reales y
concretas, tanto en el apoyo a diario hacia nuestrxs compañerxs que
permanecen secuestradxs, como en ataque directo a las instituciones y
sostenedores de este sistema de tortura y muerte.

El estallido de la rabia por el hambre y la marginalidad se ha esparcido
por las calles, mientras que los intentos del gobierno por callar a
quienes sin miedo se atreven a romper la cuarentena y el toque de queda.
Los medios de comunicación burgueses por otra parte, se alimentan de la
pobreza y miseria que siempre ha existido en las poblaciones tanto en
este territorio como en todo el mundo. La prensa siempre ha sido una
herramienta del poder y en tiempos de aislamiento los intentos de
adormecer la rabia que se venia desatando en la revuelta son el único
motivo por el cual la presencia policial y militar en las calles se ha
mantenido.

Este boletín nace en medio de la revuelta y la sección «Cartas desde
Adentro» es su esencia, ya que allí reproducimos las cartas y
comunicados enviadas por compas en la cana tanto al boletín como a otros
medios. En este número compartimos varios escritos emanados desde
distintas cárceles en Chile como también de compas en Italia y Francia.
Abrazamos en complicidad a quienes se posicionan en guerra contra el
poder y establecen vínculos afines entre compañerxs, rechazando las
dinámicas de hostilidad y competencia que el sistema carcelario pretende
imponer para autoaniquilación de lxs presxs.

La memoria es una de nuestra armas y como publicación anticarcelaria
decidimos dar un espacio para recordar al compañero anárquico Mauricio
Morales, el panky Mauri, quien cae accidentalmente en combate el 22 de
mayo del 2009

Como siempre hemos incluido también diversas noticias, artículos e
ilustraciones extraídas de medios afines.

Aprovechamos también de avisar que hemos armado un blog donde estaremos
subiendo todos los números de Rebrote en sus formatos de lectura e
impresión junto a los artículos, cartas, reflexiones y traducciones que
no estén disponibles en otros lados. Asimismo podrán encontrar los
archivos de las propas de distintos temas que hemos armado para una
distribución más inmediata. Alentamos a que vayan al blog
(rebrote.noblogs.org), y reproduzcan el material en todos lados.

Recordamos que además nos interesan las voces de todas las personas
reprimidas por la sociedad carcelaria, incluyendo a quienes estén o
estuvieron tras los muros del Sename e instituciones psiquiátricas, como
tambíén la de sus familiares y compañerxs.

Agradecemos profundamente a quienes nos aportan tanto con el contenido
como con la difusión de esta publicación: que se multipliquen las redes
de solidaridad y lugares de encuentro entre compañerxs.

Venganza por George Floyd, Alejandro Treuquil y todxs lxs asesinadxs por
el poder a manos de su bastarda policia.

¡Compañero Mauricio Morales presente!

¡Abajo todas las jaulas!

Rebrote
Boletín anticarcelario para presxs
8 de junio, 2020
rebrote@riseup.net | rebrote.noblogs.org

Descargar Rebrote boletín anticarcelario nº 5
Versión para leer:
https://mega.nz/file/So03zLCR#21_xg5wilHKS6GpAF1QUPf0sRRbGXYEFQWrPRmIVtRE
Versión para imprimir:
https://mega.nz/file/v4l1jRzT#CveSJ27B_9FWJxS2AhgAUmVbsFfmGzhULbC4uFTnbuk

TRES DÍAS CONTRA LAS TECNO-CIENCIAS 24-25-26 de julio 2º encuentro internacional

TRES DÍAS CONTRA LAS TECNO-CIENCIAS
24-25-26 de julio de 2020

2º encuentro internacional

Altradimora, Strada Caranzano 72, Alessandria (AL), Italia

VIERNES 24

13.00 comida

15.00 Presentación del encuentro.

15.30 Virus y transfiguración técnica del mundo.
Observaciones para una orientación crítica en la marea pandémica.
La exhibición de la emergencia hábilmente entrelazada con los procesos de reconfiguración técnica de la sociedad ha conducido, en poco tiempo, a una desestructuración y recomposición de la “normalidad” relegando los recuerdos del mundo anterior a la arqueología, impulsando una realidad codificada y cuerpos numéricos hechos transparentes por la dimensión médica y digital. Lo que al principio parecía un breve paréntesis pronto demostró ser todo lo contrario: una gestión bien calculada y engrasada de la emergencia con un resultado no del todo nuevo, sino derivado de procesos de larga data. La incesante producción capitalista y los ataques irremediables a la Tierra nos han empujado al mundo tóxico en el que nos encontramos, asfixiados por el precepto sanitario que amenaza con desinfectar incluso nuestro imaginario. En una sociedad con la memoria escasa y amoldada a la “instantaneidad”, es más que nunca necesario analizar el presente y todo aquello que la irreversibilidad de ciertos procesos amenaza con hacernos perder y olvidar. Para silenciar a los tecnócratas y sus alegres anuncios para el mundo artificial en curso.
Nella (Bérgamo – Italia)

20.00 cena

SABADO 25

8.00 desayuno

9.00-10.00 Los hijos como mercancía
Durante la longue durèe del capitalismo, los niños fueron considerados inicialmente como pura fuerza de trabajo, “producida” por mujeres que, por dictámenes religiosos o legales, tenían que someterse al coito y a criar nuevas y cada vez más numerosas generaciones de trabajadores, hasta el momento en que emancipándose de la institución de la familia, las mujeres consiguieron controlar su fertilidad. En la fase actual del capitalismo, se empieza a considerar a los niños como una mercancía que se puede encargar, comprar, hecha a medida, modificable con hormonas del otro sexo si su comportamiento no concuerda con el género que le hallan asignado.

Mi contribución mostrará la interrelación entre las leyes (en particular las “bioéticas”) y la expansión de estos mercados de niños aportando datos y tendencias sobre la producción de hijos como mercancía.
Daniela Danna (Lecce – Italia)

10.00-11.00 La visión transhumanista coge forma
Cómo la reproducción humana se convierte en producción de lo vivo

El transhumanismo es la ideología de la convergencia entre biotecnología, nanotecnología, informática y neurociencia. Es una visión del mundo que conduce a una transformación ontológica y antropológica del ser humano, que conduce a la erosión, erradicación y esterilización de la capacidad de conciencia y de resistencia. El hombre del transhumanismo es un humano biomedicalizado en una única dimensión totalizadora en la que se percibe al ser humano como el error, en el que todo debe corresponder a los criterios de constante perfectibilidad para una constante adaptación a un mundo-máquina. La procreación médicamente asistida (MAP) es el camino del transhumanismo, después de las niñas editadas en China, la legalización de “MAP para todos y todas” prevista por la reciente modificación de la ley de bioética francesa, es otro paso del cual no hay retorno. Un pasaje que comienza con el tubo plástico de inseminación para terminar con la selección genética de los embriones después de haber extendido la reproducción artificial del ser humano. Así la eugenesia adquiere otra cara, libremente aceptada, deseada, normalizada y trivializada, nos remite a la nueva forma de poder, no coercitivo sino dulce. El ser humano es el objetivo final del proyecto cibernético y transhumanista: la era sintética no solo significa un rediseño radical del mundo que nos rodea, también significa un rediseño de nosotros mismos, una no-vida.
Silvia Guerini, Resistencias al nanomundo (Bérgamo – Italia)

Después debate para ambas intervenciones

12.30 comida

15.00 El Pancraticon y la sociedad de la restricción
«La sociedad de control: la hemos superado. La sociedad de vigilancia: estamos en ella. La sociedad de la restricción: estamos entrando». Formulación que Pièces et main d’œuvre ha repetido y desarrollado en sus textos desde 2008, en ese momento podía parecer una exageración típica de la fraseología extremista que invade los contextos anarquistas y de izquierda. Ahora cada uno puede ver por si mismo, en China como en cualquier otro lugar, con ocasión de una pandemia o del caos climático, cómo los medios tecnológicos transforman la policía de las poblaciones, no solo la gestión y el mantenimiento del orden, sino en el sentido original de nombre, «el gobierno», «la organización de la ciudad». «La organización racional, especifica el diccionario». El Pancraticon es el dispositivo de los lazos tecno-totalitarios que tiene como objetivo «reemplazar el gobierno de los hombres con la administración de las cosas» (Engels/Saint-Simon). Sea a escala macro-social (mundo-máquina. Redes, sensores, RFID, Big Data, Inteligencia Artificial, etc.). Sea a escala micro-social (hombre-máquina, implantes, cyborgs, etc.).
Pièces et main d’œuvre (Grenoble – Francia)

19.30 cena

21.00 Digital para recolonizadores: instituciones, gobiernos occidentales e industrias al asalto de África

El imperativo de la conectividad reside en el corazón del discurso sobre el desarrollo de África. A pesar de su aparente novedad, este paradigma conectivista se encuadra en la vieja tradición modernizadora, basada en la idea lineal de “retraso” y del “ponerse al dia”. Al igual que ésta, tiende a omitir la realidad de la relación de fuerzas y dominación que estructuran el campo de las tecnologías de la información y la comunicación. Las instituciones internacionales, los gobiernos del Norte y los empresarios industriales están llevando a cabo la enésima conquista de África mediante discursos de propaganda progresista acerca de las bondades de lo digital para el desarrollo. Se está incitando a las comunidades africanas en Europa a que inviertan en el sector digital en África, basado en gran medida en la extracción de minerales, abundantes en suelo africano.
Robin Delobel, revista Kairos (Bélgica)

DOMINGO 26

8.00 desayuno
9.00 ¿Qué resistencia en tiempos de «emergencia de salud»?
Nada de lo que hemos visto en el campo en los últimos meses en términos de tecnologías de vigilancia, dictadura sanitaria, censura de voces contrarias, propaganda masiva hacia un propósito específico y destrucción de la libertad en todos los ámbitos, puede considerarse como algo «excepcional».
La infraestructura establecida por el estado, pero especialmente por los sectores financieros internacionales y multinacionales del sector digital, biotecnológico y farmacéutico, no ha sido improvisada ni creada en el acto. Ya estaba todo listo, a la espera de una condición favorable para su despliegue completo. Esta condición es un terror sanitario generalizado a escala mundial.
La situación que nos rodea, cambiada en todos los ámbitos, nos empuja, ahora más que nunca, a encontrar nuevas formas y estrategias para continuar desarrollando el pensamiento crítico dirigido a construir caminos de lucha. Enfatizando con fuerza esas prioridades de intervención que han seguido la dirección precisa comenzada con la crítica y la oposición a la ingeniería y artificialización de lo viviente, llegadas al humano-máquina del transhumanismo.
Solo entendiendo las transformaciones radicales en curso y desvelando el nuevo poder dulce, podríamos hacer frente al insidioso sistema nervioso digital que envuelve todo.
Introducción por resistencias al nanomundo (Bérgamo – Italia)
Este momento pretende ser una invitación para que grupos e individuos se confronten y aporten experiencias de resistencia para no estar preparados ante los nuevos desafíos que impone la realidad cambiada.

12.30 almuerzo

Cómo llegar

En coche:
Desde Génova por la autopista a Alessandria, salir en Ovada, continuar hacia Acqui Terme y luego hacia Rivalta Bormida. Después de pasar por los pueblos Trisobbio y Rivalta Bormida en el cruce de Cassine, seguir durante dos kilómetros y luego encontrarán la indicación de Caranzano. Desde Milán, salga en Alessandria sud y seguir las indicaciones hacia Acqui y Cassine, después de Cassine está el cruce para llegar a Caranzano. Desde Turín misma carretera.
En tren:
Tren a Acqui Terme, te venimos a buscar a la estación. Contactar por correo electrónico para quedar con suficiente antelación y no llegar durante el horario de las intervenciones.

DURANTE LOS 3 DÍAS:
– ALIMENTOS SIN EXPLOTACIÓN ANIMAL NI TÓXICOS. A DEMANDA
– MUESTRA Y DISTRIBUCIÓN DE MATERIAL INFORMATIVON: TRAE LIBROS, PERIÓDICOS, TEXTOS

Todos los debates serán traducidos al inglés.

El lugar donde transcurrirá el encuentro, Altradimora, es una casa con camas y la posibilidad de poner tiendas en el prado de la casa. Ayúdanos a organizarlo lo mejor posible, difundiendo este programa y avisándonos con antelación tu asistencia.

Información y contacto:
www.resistenzealnanomondo.org, info@resistenzealnanomondo.org www.facebook.com/3giornatecontroletecnoscienze/

https://www.resistenzealnanomondo.org/necrotecnologie/tres-dias-contra-las-tecno-ciencias-24-25-26-de-julio-de-2020-2o-encuentro-internacional/

Atualização sobre nosos companheiro anarquista Gabriel Pombo da Silva

Na passada quinta feira, 11 de junho, a Audiencia Provicial, o tribunal
que está na base da piramide judicial do Estado Espanhol, demonstrou seu
poder inquisitório ao rechaçar a petição de nulidade da Ordem Européia
de Detenção e Entrega, o que mandou nosso companheiro de volta para as
mazmorras do Estado, depois de três anos e méio de liberdade.
Logo após um ano e méio de clandestinidade, Gabriel foi detido o passado
25 de janeiro em terriotório Português devido à Ordem Européia de
Detenção e Entrega, promulgada pelo Segundo Tribunal de Girona
(Concretamente pela juíza Mercedes Alcázar Navarro) com o intuito de que
ele cumprisse mais 16 anos de prisão, como pena residual (isso como uma
resposta diante da denuncia por prevaricato que a mesma juiza teve por
esconder a ordem de liberdade imediata de Gabriel em junho de 2016,
retrassando sua saída da prisão. Essa juíza tem encaminhado sua prórpia
vingança!).
Depois de três meses e méio de prisão preventiva ( ao longo dos quais
Portugal se submeteu às pressões do Segundo Tribunal de Girona, faltando
escancancaradamente às próprias normativas europeias que teriam
permitido a excarceração de nosso companheiro) o 12 de maio, ele foi
entregue às autoridades espanholas e atualmente está na prisão de
Badajoz na região de Extremadura.
A petição de nulidade da Ordem Européia de Detenção e Entrega foi
legitimada já que ela mesma seria “ilegal” por violar um dos principios
básicos do direito: a prohibição de fazer cumprir uma sentença anterior
à qual se esta sendo extraditado. Devido a este mesmo princípio Gabriel
foi liberado no 2016. É políticamente significativo que a mesma
Audiencia Provincial (tribunal que está na base da piramide judicial do
Estado Espanhol) que há poucos dias concedeu a liberdadepara Gabriel
conceda à juiza Navarro sua vingança contra nosso companheiro(!!!??!!!).
Enquanto isso Gabriel tem sido levado para o regime F.I.E.S.,
concretamenteme F.I.E.S. 5, criado para presxs com “caraterísticas
especiais”, os quais tem a ver, mencionando uns exemplos que eles usam,
com delinquencia internacional, violência de gênero, racial ou
xenofobia, e delitos muito graves que provocam grande alarme social como
o terrorismo islamista, o fanatismo radical afim a ideologia terrorista
(!!?!!). Dentro do Regime F.I.E.S.aplicaram contra Gabriel o 2° grau e a
intervenção de todas as comunicações, tendo suas cartas abertas, lidas e
suas visitas grabadas, numa situação na qual ele já deveria “gozar” de
“beneficios como permisões de saída e ainda a liberdade condicional.
Desde que está na prisão de Badajoz, alé dos 5 cartões postáis que
entregaram para ele aos poucos dias de sua chegada, não entregaram
nenehum tipo de correspondencia para nosso companheiro, a pessar das
muitas cartas e livros que mandaram para ele. Nada embaixo do novo
regime de isolamento e repressão! Isso tudo é uma provocação contra ele,
sua mensagem é: “Você não é mais o inimigo público numero 1, mas ainda é
bastante perigoso, sobretudo no nivel ideológico… Se se comporta bem,
daremos algumas oportunidades”.
Agora que tem “classificado” ele e o mencionado tribunal emitiu sua
sentença, sabemos que se esgotaram os recursos legais para que Gabriel
volte logo a saborear a liberdade. Dentro de não muito tempo ele será
transferido para outra prisão. O advogado fará todas as apelações
necesárias até ganahr a batalha.
GAbriel está bem e forte, como sempre, manda um abraço a todos os
indivíduos afins e solidarios.
A solidariedade é uma arma… vamos usá-la… de forma séria e zagaz!
Liberdade para Gabriel! Companhieiro não estás só!
Todxs livres!
Viva a Anarquia!

Para escrever a Gabriel:
Gabriel Pombo Da Silva
Centro Penitenciario Badajoz
Carretera de Olivenza, Km 7.3
06011 Badajoz
España

¿Qué sigue después de la pandemia?

¿Qué sigue después de la pandemia?

—Al querido Gabriel Pombo Da Silva y a todas las compañeras y compañeros secuestrados por el Estado en estos días de la plaga.

El carácter multidimensional de la «crisis» actual nos recalca que la «emergencia sanitaria» originada por la Covid-19 es solo una de sus diversas facetas. Vivimos una «crisis sitémica» –como rezan los «expertos»– donde la pandemia es el rostro visible del experimento en curso en el que se enfrentan con ahinco dos modelos de capitalismo con sus rivalidades geopolíticas. A todas luces, lo que está en crisis en este mundo tripolar (Rusia/China/Estados Unidos) es la totalidad del paradigma de dominación existente, engendrado en las entrañas del progreso con el estallido de la Segunda Revolución Industrial. O, lo que es lo mismo, la hegemonía del consenso de Washington (hoy mal llamado neoliberalismo), entendido como la voz de mando del proceso de globalización económica, cultural y política, que ha impuesto como patrón universal de gestión política a la democracia representativa (partidocracia) y, al actual modelo de expansión y acumulación de capital, como ejemplo de gestión económica.

La dominación moderna ha alcanzado su límite objetivo, generando gran escepticismo en torno al sistema y sus instituciones. Esta evidencia ha provocado una metamorfosis que está dando paso al nuevo sistema de dominación. Maquillada con la soflama del «capitalismo consciente» la nueva dominación se impone, instaurando una administración política aún más autoritaria y un capitalismo con «impacto social» mucho más regulado y centralizado, infundido en los preceptos de la Cuarta Revolución Industrial (4IR, por sus siglas en inglés);i o sea, en la reconfiguración de la gestión capitalista en el Siglo XXI a través de la implantación de nuevas tecnologías, consolidando su infraestructura en el Internet de las cosas.

Con la convergencia e interacción del Internet del conocimiento, el Internet de la movilidad y, el Internet de la energía, el «capitalismo consciente» no solo consolida la prolongación del trabajo (intelectual masificado, inmaterial y comunicativo) sino la acumulación ilimitada de capital asegurando la repartición de migajas; mientras el Estado nacional –reciclado, recargado y celebrado desde los balcones de las metrópolis– se encarga de la gestión de riesgos, el análisis eficiente del Big data (con algoritmos de inteligencia artificial) y, el control progresivo de la vigilancia digital mediante las tecnologías informáticas móviles apoyadas en la red de (50 mil) satélites 5G que pueblan el espacio exteror.

Sin lugar a duda, la pandemia de la Covid-19 está dramatizando la refundación del capitalismo y su consecuente traspaso de poder hacia el Oriente, como atinadamente alerta Byung-Chul Han. Esta transferencia no será inmediata. En verdad, este cambio paradigmático –que no «crisis final» como pregonan en los círculos del bolcheviquismo posmoderno y sus ideologías satélites–ii se efecturá de manera paulatina, mediando mucha vaselina de por medio, hasta consolidarse como modelo hegemónico, siendo casi imperceptible para la mayoría de la gente de a pie que continuará en el precariado a pesar del incremento progresivo de su limosna que asegura la arrolladora continuidad del consumo,iii lo que sin duda motivará un incremento consecutivo en la percepción de bienestar en contraste con el desfase provocado por los procesos de histéresisiv –en sentido bourdieuano– recién inaugurados con la intrusión de la Cuarta Revolución Industrial y la expansión del capitalismo cognitivo. Este desfase temporal entre el ejercicio de una fuerza social y el despliegue de sus efectos por la mediación retardada de su incorporación, será cada día más evidente con el incremento del desempleo en los sectores manufactureros y, la segregación de la población adulta mayor, que no solo resultará socialmente inútil en este nuevo paradigma («nueva normalidad») sino que se convertirá en estorbo para el capital –por su improductividad digital– y, en lastre para el Estado-nación remasterizado.

Concretar el cambio implicará el apogeo de guerras comerciales (¿hay otras?) y, quizá, hasta de enfrentamientos militares por el control del espacio exterior y el dominio y/o influencia geopolítica; además de la erradicación sistemática de los conflictos internos («terrorismo doméstico») incitados por una reducidísima minoría refractaria que continuará en pie de guerra frente a toda autoridad a pesar de contar con el repudio unánime de las mayorías ciudadanas. Pero, definitivamente, esta mudanza de paradigma de la mano de la ascención del imperialismo chino, no tendrá nada que ver con la «programación predictiva» de los «reptilianos pedófilos-satánicos» –en alianza con el lobby judío y los nuevos Illuminatis de Baviera– que, animados por su ambición infinita, tratan de imponer una dictadura global regida por los mandarines chinos con campos de concentración y consumo obligatorio de arroz frito, como profetiza el vulgo neonazi estadounidense. Lejos de la tesis conspiranoica sobre la instauración del Gobierno Global; el Estado nacional recargado, está reafirmando su legitimidad y autoridad en el actual proceso de desglobalización acelerada. Así se erige como la única fuerza capaz de proteger a sus ciudadanos y librar la guerra a gran escala contra el «enemigo invisible» con el auxilio incondicional de las nuevas tecnologías. El nuevo Estado nacional aprovecha la emergencia y se torna omnipresente y omnipotente: se alzan fronteras rígidas (muros y alambradas); los ejércitos se aprestan a «servir» y; se reafirma peligrosamente la identidad nacional expandiendo el repudio a todo lo «extraño». Se vislumbra el retorno a la «producción nacional» desde la óptica del «decrecimiento» (argumentando desfachatadamente que «es insostenible el crecimiento cero»). Los mandatarios de los Estados nacionales asumen poderes plenipotenciarios con el apoyo de las mayorías que cierran filas asintiendo las gestiones gubernamentales durante la pandemia. Emerge nuevamente la Hidra de Lerna con sus múltiples cabezas: el Estado, el capital, la religión y, la ciencia, consolidan su autoridad. El fascismo –en sus acepciones roja o parda–, gana aceptación y popularidad entre la muchedumbre y se alza como «solución final» frente a la «amenza» ofreciendo protección a sus connacionales.

El Nuevo Mundo parece un déjà vu de la década de 1920. Se trata de una restauración profunda. Una suerte de cambio radical de look del poder capitalista que va mucho más allá de la clásica remozada con hojalatería y pintura a la que se ha sujetado siempre de manera cíclica. Esta vez ha decidido someterse a una intervención quirúrgica de reconstrucción total a través de las nuevas tecnologías y la instrumentalización de formas inéditas de explotación que articulan y/o superponen la clásica explotación del trabajo asalariado con la autoexplotación del sujeto de rendimiento y, la hiperexplotación del ciberconsumidor: la nueva fuerza de (co)producción gratuita. Esta vez no habrá una nueva vuelta de rosca ni siquiera habrá una tuerca que apretar. En esta ocasión, los «ajustes» seran constantes y se efectuaran desde la nube.

Para reforzar esta permuta ya se anuncia la confluencia de los pares opuestos (izquierda/derecha), evidenciando, una vez más, la falsedad de sus antagonismos «irreconciliables»: marxistas y anarcocapitalistasv sellan con beso de lengua la imposición global de la Cuarta Revolución Industrial, afianzando la agenda con más de lo mismo; es decir, más capitalismo in saecula seculorum. Para eso se alistan en nombre del «capitalismo social» y en defensa de las nuevas tecnologías «emancipatorias» los intelectuales orgánicos al servicio de Otro mundo posible. En este sentido, llama la atención la fusión de dos posturas político-económicas opuestas, generalmente presentadas como contradictorias: el paternalismo y el libertarismo o anarco-capitalismo.

Desde 2008, el profesor de economía y ciencias del comportamiento, Richard Thaler, catedrático por la Universidad de Chicago y Premio Nobel en Ciencias Económicas 2017 –por «sus aportes en economía conductual»–, ha venido desarrollando el concepto de «paternalismo blando» o «paternalismo libertario». Lo que lo llevó a escribir Nudget vi en co-autoría con Cass Sunstein, profesor de jurisprudencia de la Escuela de Leyes de Harvard. La «teoría del nudging (del “empujoncito”)» de Thaler, se basa en la factibilidad de diferentes procedimientos que coadyuvan a «empujar», o sea, a incentivar o alentar, ciertas decisiones influyendo en el «sistema automático» de las personas con el propósito de provocar cambios en el comportamiento público, impulsando decisiones más racionales que los haga felices a largo plazo. A este proceso inductivo que establece vínculos entre los análisis de la economía del comportamiento y la psicología social, lo denominan «arquitectura de las decisiones» y, lo fomentan en busca de «mejores resultados individuales y sociales». Thaler y Sunstein, consideran que «es legítimo que los arquitectos de decisiones influyan en el comportamiento de las personas haciendo sus vidas más largas, más sanas, y mejores»;vii diseñando la arquitectura del contexto decisional de manera que se induzca a la toma de «una decisión más consciente en función del beneficio social y del beneficio propio»,viii lo que embona con el tránsito hacia ese «capitalismo consciente» que comentaba antes y que hoy se presenta –en palabras de Rajendra Sisodia y John Mackey–, como «la cura del mundo».

Tampoco hay que rascarle mucho para encontrar en el bando «opuesto», es decir en marxistlandia, una veintena de impulsores de este «capitalismo social». En esas mismas latitudes (de arenas movedizas), encontraremos desde filósofos, sociólogos, economistas y catedráticos, hasta cibermarxianos optimistas de las tecnologías que plantean que su icónica «lucha de clases» se ha trasladado al terreno del conocimiento y que la batalla final se librará en el ciberespacio; apostándole a la toma del Palacio de Invierno por las comunidades cibernautas: germen de la nueva organización político-social fundada en la cooperación mutua a través de la conexión en red. Uno de estos especímenes que destaca con creces en los círculos cibermarxianos es Richard Stallman. Adorado hasta en nuestras tiendas, Stallman es fundador del movimiento del software libre, del sistema operativo GNU/Linux y de la Fundación para el Software Libre.

Otro notorio cibermarxiano es Eben Moglen, profesor de derecho e historia en la Universidad de Columbia y fundador/director del Software Freedom Law Center; autor de un texto sui géneris que imita el espíritu del Manifiesto Comunista intitulado «The dotCommunist Manifesto».ix Desde luego, no todos los cibermarxianos se han sentido a gusto con el tufillo que desprende semejante Manifiesto –más asociado hoy a la exégesis marxiana-leninista que a las elucubraciones del propio Carlos Enrique de Tréveris– y han recurrido a la sana distinción entre «comúnistas» (commonists) y, «comunistas», haciendo énfasis en la palabra «común» y resaltando la sutil diferencia que produce un acento o, una letra de más, como resulta con la doble «n» en lengua inglesa. Tal es el caso de Lawrence Lessig, célebre creador de la «sana distinción» entre comunista sin acento y la acentuación políticamente correcta. Fundador de la encumbrada Creative Commons, profesor de jurisprudencia de la Harvard Law School, especializado en derecho informático y, precandidato en las primarias del Partido Demócrata para la nominación presidencial de los Estados Unidos. Desde la década de 1990 detectó que los oligopolios de la computación y los Estados nacionales, comenzaban a controlar el ciberespacio y a adaptarlo a su provecho mediante la imposición del Protocolo de Internet (IP) y la acumulación de datos de los internautas, en detrimento de la idea original que promovía un Internet creativo basado en la descentralización, la libre información y la socialización del conocimiento a través del libre acceso y la posesión en común.x Sin embargo, vale señalar –aunque para nosotros debería resultar obvio– la concordancia intrínseca entre las teorías fomentadas desde el cibermarxismo y el «anarco-comunismo informacional» y, los promotores del capitalismo cognitivo o cibercapitalismo en torno a las ilusiones tecnológicas y la producción de lo común. Una lectura rápida del discurso de la nueva empresa en línea, nos confirma ampliamente la instrumentalización comercial del común y, el uso permanente de la «inteligencia colectiva» y la «cooperación mutua» como recursos fundamentales del rendimiento de las empresas.

Curiosamente, las tesis en torno a la categoría de común han ido hilvanando la metanarrativa de la neoizquierda en nuestros días. El culto al común –así en singular– no es nuevo, hace un siglo que viene cocinándose en los círculos marxianos antibolcheviques.xi La paradoja es que desde principios del milenio, comenzaron a machacarnos el concepto dos egregios del leninismo posmoderno: Antonio Negri y Michael Hardt. En los primeros años de la década del 2000, ambos autores pusieron sobre la mesa este «producto», definiéndolo en Imperio como «la encarnación, la producción y la liberación de la multitud».xii Retomarían su desarrollo conceptual en las páginas de Multitud xiii y, Commonwealth,xiv haciendo uso de una retórica gatopardista que a veces pretende confundirse con las viejas tesis anarco-mutualistas en busca de incautos, subrayando que «el capitalismo y el socialismo, aunque en ocasiones se han visto mezclados y en otras han dado lugar a enconados conflictos, son ambos regímenes de propiedad que excluyen el común. El proyecto político de institución del común que desarrollamos en este libro traza una diagonal que se sustrae a estas falsas alternativas –ni privado ni público, ni capitalista ni socialista– y abre un nuevo espacio para la política».xv

No obstante, Hardt y Negri no han sido los únicos en promoverxvi este libreto. Una nutrida legión de marxianos posmodernos –muchas veces antagónicos, of course– le ha seguido el hilo, desarrollando alianzas con una fauna variopinta que, como era de esperar, incluye al neoblanquismo invisible; al situacionismo tardío; al «comunismo internacionalista» (GCI); al anarcopopulismo especificista (neoplataformismo); a sectores del trasnochado anarcosindicalismo; al anarcofederalismo de síntesis y; al ecologismo municipalista; sin olvidar a uno que otro liberal con esteroides de esos que gozan de gran reputación en nuestras tiendas, a pesar de ser confesos propagandistas del Sanderismo y ahora, inescrupulosos promotores de la candidatura presidencial de Joe Biden en nombre del «voto responsable» –léase Michael Albert, Noam Chomsky, o ese deleznable piquete de ex «radicales» de izquierda, fundadores de la Students for a Democratic Society en la década de 1960 y, firmantes de una carta de apoyo a Bidenxvii (Todd Gitlin, Carl Davidson, Robb Burlage, Casey Hayden, Bill Zimmerman, entre otros personajes «connotados»).

Entre los marxianos posmodernos que se encargan de continuar sentando las bases estructurales del común, destaca la mancuerna Pierre Dardot-Christian Laval. Fundadores del grupo Question Marx y, especializados en la obra de San Carlos Enrique de Tréveris, han publicado en coautoría varios ensayos sobre las disquisiciones del viejo gurú, así como reflexiones propias sobre la revolución en el siglo XXI. Con una prosa mucho menos densa que la metatranca discursiva de Negri y Hardt y, guardando distancia del enfoque leninista de éstos, han abordado el tema del común como alternativa socio-económica alejados de las apretadas hormas de las distintitas variedades de comunismo de Estado realmente existentes.

En ese tenor sacaron a la luz «Común. Ensayo sobre la revolución en el siglo XXI»,xviii un texto con claras ínfulas refundacionales en el tenor marxiano-libertario con cierta reminiscencia gueríniana que coloca nuevamente en la agenda la temática de la Revolución, a partir de la disección minuciosa de la trilogía intelectual de Hardt y Negri, no sin dejar de acusar cierto «neoproudhonismo incapaz de concebir la explotación de otro modo que como “captación ilegítima de los productos del trabajo a posteriori” [que demuestra] una ceguera cargada de consecuencias acerca de las formas contemporáneas de explotación de los asalariados y las transformaciones inducidas por el neoliberalismo en las relaciones sociales y las subjetividades».xix

Con ese espíritu refundacional, no escatiman a la hora de echar mano extensa (a veces de manera crítica) de Proudhon y, reiterar ese distanciamiento con la alienación comunista que mencionábamos antes, ratificando que: «Lo que ellos [comunistas y socialistas] llaman “emancipación” es en realidad la opresión política absoluta y una nueva forma de explotación […] porque creen que el poder y la fuerza provienen del centro y de arriba, no de la actividad de los individuos. En el fondo ahí no hay más que un ideal de Estado organizador que generaliza la policía y que sólo toma del Estado su lado reaccionario, el de la pura coerción».xx

Dando rienda suelta a sus asépticas interpretaciones teóricas en torno al devenir de los «movimientos sociales» que se suscitaron a comienzos de la década pasada (2010-2012) y captaron la atención de los medios de desinformación masiva –léase las romerías de los Indignados (15-M) con su camping en la Puerta del Sol; la movilización del 15 de octubre (15-O) con su espectacular Occupy Wall Street; la ocupación de la Plaza de Syntagma en el centro de Atenas y; la ocupación de la Plaza Taksim en Estambul–, Dardot y Laval «descubren» en estos simulacros «una invención democrática» que puso en práctica el «principio de común» como crítica a la democracia representativa, evidenciándose como el principio de la democracia política bajo su forma más radical y, erigiéndose como el «término central de la alternativa política para el siglo XXI»,xxi obviando la inmediata recuperación sistémica de estos movimientos y su compulsiva degeneración en partidos políticos (Partido X, Podemos, el Sanderismo con Biden, Syriza, etc., etc.).

Evidentemente, la ausencia de experiencia empírica de los autores de Común, debilita toda la argumentación del ensayo y, explica la carencia de propuestas fácticas y consecuentes con los tiempos a lo largo de 669 páginas. Como ya es costumbre entre los teóricos marxianos –incluidos los marxianos-libertarios– la recurrencia a extrapolar sus contemplaciones académicas a la construcción de paradigmas es una constante. Desde luego, esta afirmación no corresponde en absoluto con una postura anti-intelectual –más próxima a la vulgata fascista que a nuestra praxis–; más bien corrobora la necesidad de tamizar toda la producción académica guardando prudencial distancia con la manufactura institucionalizada y sus vacas sagradas, siempre divorciadas de la práctica y, generalmente al servicio del «establishment». Pero además, pretende ratificar la urgencia de reelaboración teórica a partir de la práctica anárquica más notoria, facilitando los contextos intelectuales que la nutran y ensanchando las arterias de la praxis. Sólo así, podremos afrontar globalmente la propia vastedad de nuestros proyectos destructivos y nuestros propósitos de emancipación total, rompiendo definitivamente con toda la alienación izquierdista, abandonando las conceptualizaciones y las prácticas ajenas, comprendida la remasterización del común.

Gustavo Rodríguez,

Planera Tierra, 22 de mayo de 2020

(¡con Mauri en el corazón!)

(Extraído del folleto «Covid-19: la anarquía en tiempos de pandemia», Rodríguez, Gustavo, mayo 2020)

i Así quedó asentado a finales de enero del presente año en el nuevo manifiesto «Davos 2020», emitido en el marco de su 50 Reunión Anual del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés): «El propósito universal de las empresas en la Cuarta Revolución Industrial, en la cual impulsa el capitalismo de stakeholders como la nueva vía para los negocios con impacto social». Disponible en: https://www.weforum.org/agenda/2019/12/davos-manifesto-2020-the-universal-purpose-of-a-company-in-the-fourth-industrial-revolution/ (Consultado 18/5/20).

ii El mejor exponente de estas expresiones del bolchevismo posmoderno es el filósofo lacaniano Slavoj Žižek, quien publicara recientemente un artículo intitulado «Coronavirus es un golpe al capitalismo al estilo de ‘Kill Bill’ y podría conducir a la reinvención del comunismo», donde asegura que la epidemia «es una especie de ataque de la ‘Técnica del corazón explosivo de la palma de cinco puntos’ contra el sistema capitalista global», en alusión al clásico de Tarantino y en detrimento de los sermones de San Carlitos de Tréveris: «Las contradicciones crean explosiones, crisis en el curso de las cuales todo trabajo se detiene temporalmente mientras que una importante parte del capital se destruye, volviendo de nuevo el capital, por la fuerza, a un punto en donde, sin suicidarse, puede volver a emplear nuevamente de forma plena su capacidad productiva» Marx, K., Le Capital, livre I, Presses Universitaires de France; París, 1993.

iii Los guarismos económicos estimados por los apologetas de la Cuarta Revolución Industrial auguran la abundancia; según sus cálculos la revolución 4.0 agregará US$14,2 billones a la economía mundial en los próximos 15 años con un impacto social directo, erradicando de la faz de la tierra cualquier negatividad aún presente en la servidumbre voluntaria, argumentando ad nauseam su infinita felicidad.

iv Bourdieu, Pierre: Argelia 60. Estructuras económicas y estructuras temporales, Siglo XXI, Buenos Aires, 2006; y en ensayos en torno a las investigaciones sobre las «estrategias» en las prácticas de los bearneses y cabileños en Argelia.

v Este oxímoron a cobrado presencia en las últimas tres décadas al configurarse como «tendencia» al interior del autodenominado «movimiento libertario (libertariano)», también conocido como Libertarian Party. En el plano económico, mantiene los mismos postulados del libertarismo con fuerte influencia de la escuela austriaca y las «tesis» de Robert Nozick (Anarquía, Estado y utopía, 1974). En años recientes sus congresos anuales han sido motivo de notas sensacionalistas al realizarse en el enclave turístico del puerto de Acapulco, en México, bajo el pomposo rótulo de «Anarchapulco», contando con la presencia de especialistas internacionales en transacciones financieras en criptomonedas; gurús del «capitalismo social» y; activistas políticos como Rick Falkvinge, fundador del Partido Pirata Sueco y uno de los principales ideólogos de la lucha contra la corrupción política en Suecia y; Derrick Broze, periodista de investigación, conferencista, aspirante a alcalde de la ciudad de Houston (2019) y, activista indigenista, dedicado al «empoderamiento de las comunidades indígenas» y la denuncia de «la hipervigilancia del Estado sobre los ciudadanos».

vi Thaler, Richard H., Sunstein, Cass R., Nudge: Improving Decisions about Health, Wealth, and Happiness, Yale University Press, 2008 (Traducción al castellano, Un pequeño empujón: El impulso que necesitas para tomar mejores decisiones sobre salud, dinero y felicidad, Taurus, México, 2017).

vii Ibíd.

viii Ibíd.

ixMoglen, Eben, The dotCommunist Manifiesto, enero 2003. Disponible en línea: http://emoglen.law.columbia.edu/publications/dcm.html (Consultado 20/5/2020)

x Vid., Lessing, Lawrence, The Future of Ideas: The Fate of the Commons in a Connected World, Random House, 2001 (Traducción al castellano, El futuro de las ideas: el destino de los comunes en un mundo conectado).

xi Llama la atención que ni en las premisas del anarco-comunismo (Kropotkin, mediante) ni en la tradición anarcosindicalista, jamás se haya postulado nada sobre el «común». Siempre han teorizado sobre la propiedad colectiva de los medios de producción y la socialización de los servicios y bienes de consumo sin diferencias de clase, es decir, de manera igualitaria y nada más; sin mayores diferencias con los postulados marxista-leninistas y, guardando distancia del paradigma proudhoniano que ya identificaba la fuerza social espontánea de lo común. Salvo las críticas al secuestro burocrático de los marxianos-leninoides con la firme decisión de prolongar la vida del llamado Estado proletario que, claramente, dista de las tendencias libertarias; tanto anarco-comunistas como anarcosindicalistas, optan por instaurar un «sistema» (con bastantes imprecisiones teórico-prácticas) de colectivización y socialización, que no presenta mayores divergencias en los hechos con las prácticas burocráticas leninistas que tanto critican. Vale, agregar sobre el tópico que en los contadísimos y excepcionales casos en que los teóricos comunistas marxistas han tratado de conceptualizar lo «común», lo han hecho expresando verdaderos desatinos, como aquella afirmación de Lenin a principios del período denominado Comunismo de guerra (1918-1921): «todo es común, incluso el trabajo».

xii Vid., Hardt, Michel & Negri, Antonio, Empire, Harvard University Press, Cambridge, Massachusetts, 2001 (traducción al castellano: Imperio, Paidós, Buenos Aires, 2002).

xiii Hardt, Michael y, Negri, Antonio, Multitud: guerra y democracia en la era del Imperio, Debate, Barcelona, 2004.

xiv Hardt, Michael y, Negri, Antonio, Commonwealth. El proyecto revolucionario de una revolución del común, Akal, 2011.

xv Ibíd. p. 11.

xvi El empleo de este vocablo –aparentemente inocuo– no es casual, encubre una conceptualización bastante más intrincada que halla sus raíces en los objetivos básicos de la mercadotecnia en la denominada marketing mix, en referencia a la mezcla de tácticas o acciones empleadas para posicionar una marca o producto en el mercado mediante la intervención de las 4P: precio, producto, promoción y plaza (lugar).

xviiDisponible en: https://www.thenation.com/article/activism/letter-new-left-biden/(Consultado 20/5/2020).

xviii Laval, Christian y, Dardot, Pierre, Común. Ensayo sobre la revolución en el siglo XXI, Gedisa, Barcelona, 2015.

xix Ibíd. p. 223

xx Ibíd. p. 243.

xxi Ibíd. Presentación, s/p.

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